jueves, 31 de enero de 2013

San Hipólito de Támara

Uno de mis lugares sagrados preferidos es la Iglesia de San Hipólito el Real. Támara de Campos es hoy un pueblecito de la provincia de Palencia, situado cerca de Astudillo, que se enorgullece de un descomunal templo, testigo unos tiempos tan gloriosos que hoy es imposible casi ni imaginar.
 

















En su interesante monografía sobre Támara, José Antonio Chico López aporta dos razones para explicar la magnificencia de este templo, que gozó de la protección real y de reconocimiento papal: el recuerdo de los reyes castellanos a la batalla de Támara (tuviese o no allí lugar), en la cual se unieron los reinos de Castilla y de León; y los frecuentes milagros que, al parecer, allí tuvieron lugar, según testimonio de los reyes Fernando IV y de Alfonso XI.


















El templo está consagrado al mártir san Hipólito de Roma, en cuya fecha de celebración, 13 de agosto, nació el rey Alfonso XI de Castilla. En su interior, destaca la pila bautismal, decorada con relieves relativos a los evangelios de los domingos de cuaresma; los retablos, con esculturas de Felipe Vigarny, en los que son fácilmente identificables los Reyes Católicos; la gran reja de la Capilla Mayor, o el magnífico órgano ibérico, sustentado por una columna, junto al coro del Cabildo.


Para ilustrar y saborear este lugar sagrado, nada mejor que imágenes del templo con acompañamiento musical a cargo de Françis Chapelet, el gran organero francés, improvisando precisamente en el órgano de Támara.


miércoles, 30 de enero de 2013

San Lesmes de Burgos

El Martirologio romano del día de hoy recuerda un santo, cuya memoria perdura ligada a un lugar de la ciudad de Burgos. Dice así esta noticia: En la ciudad de Burgos, en Castilla la Vieja, región de España, san Adelmo, abad, que convirtió en Monasterio la capilla de San Juan y el hospital de pobres contiguo (1097).

A la entrada de la antigua ciudad de Burgos, se encontraba este hospital de pobres y peregrinos y una capilla dedicada a san Juan. Adelmo estableció allí un Monasterio bajo la regla de san Benito, que prosperó a la sombra de la ciudad. Durante la Edad Media, fue lugar de parada, junto a la muralla de la ciudad, para los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela.

Durante el siglo XVI fueron renovados los edificios del monasterio, además de la primitiva capilla del Hospital. Pero, a comienzos del siglo XIX, en el contexto de la Guerra de la Independencia, fue destruido todo el complejo. Hoy perdura sólo lo que fue la Capilla del Hospital, convertido en la actual Parroquia de San Lesmes, donde está enterrado el santo. Que no nos falte la intercesión de aquel monje, cuya obra no sólo dio gloria a Dios, sino que ayudó a tantos hombres.


lunes, 28 de enero de 2013

Santo Tomás de Aquino en Fossanova

El siguiente video contiene una meditación sobre la figura de santo Tomás de Aquino, mostrando imágenes de la Abadía de Fossanova, en la que falleció tal día como hoy del año 1275. La música que se escucha pertenece al Magister Perotinus, un autor parisino contemporáneo al santo.


sábado, 26 de enero de 2013

Los santos fundadores del Císter

Celebramos hoy los monjes la fiesta de los fundadores de los cistercienses: Roberto, Alberico y Esteban Harding. A finales del siglo XI, apostaron por una forma más intensa de entrega al Señor en la tradición monástica. Como ilustración de su fecunda corriente espiritual, hemos escogido un monasterio hoy abandonado y destruído con el paso del tiempo, pero que fue una de las primeras casas cistercienses: Pontigny. La música que acompaña a las imágenes es la Salve, cantada según el peculiar modo de los cistercienses.


viernes, 25 de enero de 2013

Damasco


Allí fue donde a los discípulos de Jesús, comenzó a llamárseles "Cristianos". Junto a la ciudad de Jerusalén, al alba de nuestra fe, se encuentra la ciudad de Damasco. Allí se había establecido una comunidad cristiana, según parece formada a partir de conversos al judaísmo de procedencia helénica.

¿Quién eran estos prosélitos? Los judíos, tal como aparecen en las últimas etapas del Antiguo Testamento, se consideraban a sí mismos como portadores de la luz de la Sabiduría, que Dios les había transmitido a través de la Ley. Desde la destrucción del reino de Israel, se habían dispersado por todo el Mediterráneo, y habían atraído a la fe a personas que no pertenecían a su raza, pero que aceptaba la Alianza, y eran aceptados por Dios a través de la circuncisión. Eran los prosélitos. Pues bien, algunos de estos prosélitos judíos se convirtieron al cristianismo. Principalmente contra éstos, que pronto relativizaron las normas de la Ley, se dirigió la violenta persecución que tuvo en Pablo a uno de sus principales protagonistas.

La ciudad disfrutó de una notable prosperidad durante el Imperio Romano, alcanzando su máximo grado de prosperidad en el siglo II, cuando obtuvo del emperador Septimio Severo el título de colonia, es decir, lugar de ciudadanos romanos. Su fuente de prosperidad era el comercio, con caravanas que se internaban hacia el Oriente y Arabia.


La dominación romana continuó durante el Imperio Bizantino. El cristianismo había alcanzado entonces un gran desarrollo. Toda esta zona estaba comprendida en el llamado Patriarcado de Antioquía, que terminó por separarse de los demás patriarcados tras el Concilio de Éfeso. En cualquier caso, en toda la Provincia de Seria llegó a desarrollarse un floreciente monacato, con figuras tan representativas como Efrén el Sirio o, ya en la época de la dominación musulmana, el gran escritor san Juan Damasceno. La invasión musulmana del siglo VII supuso el fin de la época cristiana, y el comienzo de una presión religiosa que llevará a la mayoría de la población a abrazar la nueva religión. Sin embargo, la minoría cristiana ha perdurado hasta nuestros días. Si en la foto de arriba vemos la entrada de la ciudad antigua, en la de abajo vemos la catedral cristiana de la ciudad.


Actualmente hay en Siria, según las estimaciones más fiables, en torno a dos millones de cristianos. El cristianismo sirio sirio está dividido en dos ramas: uno que está en comunión con la Iglesia Católica, y otra unida a la Iglesia Ortodoxa, también llamada Jacobita, que procede el Patriarca Jacobo Baraday. En cualquier caso, descienden del venerable Patriarcado de Antioquía, uno de los tres primeros junto con Alejandría y Roma. Desgraciadamente, hoy vuelve a vivir la ciudad una nueva situación de persecución, como en la época de Pablo. Él, que fue el perseguidor de los cristianos, interceda especialmente por la Iglesia en Siria, para que pueda seguir confesando a Cristo como salvador de los hombres, y sirva de instrumento de paz en un lugar tan atormentado por la guerra y las discordias humanas.




miércoles, 23 de enero de 2013

La iglesia de San Juan de Baños

La época posterior al colapso del Imperio Romano es conocida en toda Europa como los siglos oscuros de la Alta Edad Media. Sin embargo, la monarquía visigótica en Hispania constituye una honrosa excepción, hasta su propia extinción con la invasión musulmana del año 711.

De Iglesia Hispana surgieron dos célebres doctores, San Isidoro de Sevilla y san Ildefonso de Toledo, cuyas obras fueron leídas, copiadas y estudiadas en toda la Cristiandad medieval. Hoy, en la memoria de santo obispo de Toledo, vamos a evocar uno de los lugares santos que de dicha época tan lejana han llegado hasta nosotros: la iglesia de San Juan de Baños.


Se encuentra a unos doce kilómetros de la ciudad de Palencia. Fue mandada construir por el rey Recesvinto el año 661, sobre una fuente cuyas aguas, según la tradición, sanaron al rey enfermo. No es de grandes dimensiones, y su disposición sigue las pautas comunes del primer cristianismo difundido por el Imperio Romano. De hecho, su planta es basilical, es decir, similar a las primitivas basílicas romanas en las que los funcionarios públicos impartían justicia, y que luego fue convertida por los cristianas en la forma arquitectónica típica para sus templos.

Es lógico pensar que este recinto ha albergado la liturgia propia del cristianismo hispano-romano y luego mozárabe. Es decir, la que hoy llamamos liturgia mozárabe. Se trata de una ordenación del culto cristiano no idéntica a la liturgia romana, que es hoy la común en la Iglesia Católica occidental o latina. Se caracterizaba por una distinta disposición tanto en el Oficio Divino como en la celebración de la Eucaristía. En lo que a la celebración de la Eucaristía se refiere, esto significa que todos los textos de la liturgia mozárabe son distintos a los que nosotros empleamos de la liturgia romana; además, su disposición es distinta. Así, por ejemplo, el Padre Nuestro se reza después de la fracción del pan; ésta, además, se realiza ritualmente en nueve fragmentos, que simbolizan los distintos misterios de la vida de Cristo.

La liturgia mozárabe fue sustituida por la romana a finales del siglo XI, excepto en algunos lugares, como Toledo, donde ha pervivido hasta nuestros días. El Cardenal Cisneros, a comienzos del siglo XVI, la reformó y codificó. Por fin, a finales del siglo XX ha vuelto a ser editada, y se han ampliado los permisos para poderla celebrar.

En cualquier caso, esta venerable tradición espiritual nos remite a nuestros padres en la fe, a aquellos que con su vida y su testimonio hicieron posible que la fe en Cristo llegase hasta nosotros. San Juan de Baños es todavía hoy no sólo un hermoso ejemplo de la arquitectura de la antigüedad cristiana, sino un venerable testigo de la fe de aquellos remotos cristianos.


martes, 22 de enero de 2013

El Camino de San Vicente, mártir

Hoy celebra la Iglesia de España la memoria de un mártir de la antigüedad, del que apenas quedan hoy recuerdos: San Vicente. El Martirologio Romano nos anuncia este celebración con las siguientes palabras: 

San Vicente, diácono de Zaragoza y mártir, que durante la persecución bajo el emperador Diocleciano hubo de sufrir cárcel, hambre, potro, láminas candentes, hasta que, en Valencia, en la Hispania Cartaginense (hoy España), voló al cielo a recoger el premio del martirio (304).

Un buen amigo y peregrino, Miguel Perles Alabau, tuvo hace unos años la feliz idea de abrir con su peregrinación el Camino de San Vicente, desde los Pirineos hasta Valencia, siguiendo las huellas no sólo del mártir sino, sobre todo, del comienzo del Cristianismo en nuestro país, un comienzo humilde y regado por la sangre de cuantos dieron su vida por confesar a Cristo. En su Blog Fragmentos del Camino nos ha dejado no sólo el relato de su peregrinación, sino también un interesante relato del Martirio de San Vicente Mártir.

La imagen de san Vicente que vemos proviene de la iglesia de Labuerdalocalidad que se encuentra en el Camino de San Vicente.


Debajo de nuestras actuales ciudades se encuentran las ciudades romanas, en las que vivieron nuestro antepasados. Allí, de forma sencilla y pobre, se encuentra la semilla de la fe que aceptaron aquellos primeros cristianos y que, de generación en generación, ha llegado hasta nosotros. Por eso, sin duda, esa humildísima y casi perdida huella es santa para nosotros, por más que la distancia y su propia pequeñez parezcan arriesgar su recuerdo.



lunes, 21 de enero de 2013

Santa Inés en la agonia



Visitar la ciudad de Roma tiene el problema de que son tantos los lugares cargados de historia que se pueden visitar, que se necesitan varios años para conocer rincones que allí pasan por pequeños, pero que en cualquier otro sitio serían monumentales. Éste es el caso de la Basílica de Santa Inés en la Agonía.
Santa Inés era una joven cristiana que confesó su fe durante la última y más terrible persecución contra los cristianos, decretada por Diocleciano a comienzos del siglo IV. Murió decapitada en el Estadio de Domiciano, sobre el que posteriormente se construyó la Plaza Navona. Santa Inés fue sepultada fuera de la ciudad, en la Vía Numentana, donde Constanza, hija de Constantino, mandó edificar la Basílica de Santa Inés Extramuros.
Sobre el lugar del martirio en el antiguo Estadio de Domiciano, se edificó la Basílica de Sant'Agnese in Agone, Santa Inés en la Agonía, hoy en el centro de la Plaza Navona de Roma. Es lugar de culto desde el siglo VIII. La actual iglesia es obra del arquitecto barroco Borromini.
Escasamente setenta y cinco años después de su martirio, el santo obispo de Milán Ambrosio ya celebraba con solemnidad la memoria de la santa virgen mártir. Comienza un memorable sermón con estas palabras:
Celebramos hoy el nacimiento para el cielo de una virgen, imitemos su integridad; se trata también de una mártir, ofrezcamos el sacrificio. Es el día natalicio de santa Inés. Sabemos por tradición que murió mártir a los doce años de edad. Destaca en su martirio por una parte, la crueldad que no se detuvo ni ante una edad tan tierna; por otra, la fortaleza que infunde la fe, capaz de dar testimonio en la persona de una jovencita.

domingo, 20 de enero de 2013

Caná de Galilea




La tradición cristiana ha identificado el pueblo árabe de Kafr Kana, en la Baja Galilea con Caná. Aquí es donde, según la tradición, Jesús realizó el milagro del vino cuando fue a una boda y convirtió el agua en vino. En el siglo XVII Kafr Kana fue reconocida por el Vaticano, y el Papa confirmó oficialmente que esta localidad se correspondía con Caná de Galilea. Tras su reconocimiento, el pueblo se añadió a la lista de lugares sagrados del Cristianismo. Algunos investigadores identifican Kafr Kana con la Kana que mencionan las antiguas cartas egipcias de Amarna (escritas hace unos 4.000 años). 
Durante el periodo romano-bizantino (hace entre 1.000 y 2.000 años) habitó aquí una gran comunidad judía, pero parece que en tiempos de los mamelucos (hace unos 800 años) la mayoría de los residentes de Kafr Kana eran cristianos, aunque siguiera habiendo una comunidad judía. En la actualidad, buena parte de sus habitantes son musulmanes.
En el centro del pueblo hay algunos vestigios de antiguas construcciones y cuevas funerarias. Sus habitantes han levantado casas nuevas hacia el sureste y el noreste del antiguo poblado. El lugar más destacado es su iglesia católica, construida en 1879 en el punto donde según la tradición se produjo el milagro del vino. Junto a esta iglesia se encuentra la ortodoxa griega de San Jorge, construida en 1886, donde se encuentran dos vasijas de piedra que, según los fieles, son las mismas en las que Jesús convirtió el agua en vino. 
Existe igualmente otra iglesia bajo la advocación de San Bartolomé, construida, según la tradición, donde se alzaba la casa de Natanael de Caná (San Bartolomé), uno de los discípulos de Jesús.
Cada año visitan Kafr Kana unos 200.000 turistas. Inspirada por el milagro del vino, se ha desarrollado aquí la tradición de celebrar bodas, así como de renovar votos nupciales para fortalecer el matrimonio, y los visitantes suelen comprar vino. 

viernes, 18 de enero de 2013

San Benno de Munich. Urbs Ierusalem beata.

El día 16 de enero, en Munich, me acerqué a hacer un rato de oración a uno de mis templos favoritos de la ciudad: la iglesia de San Benno. En el año 1883 la ciudad estaba creciendo tanto, que el arzobispo Anton von Steichele impulsó la construcción de las parroquias de San Pablo en el Theresienwiese, San Maximiliano y San Benno. Se le encargó el proyecto a Leonhard Romeis. Los fondos para la construcción provinieron de donativos particulares, de diversas fundaciones, y de las aportaciones de la casa real de Baviera (especialmente el altar mayor y el baldaquino, que fueron costeados por el príncipe regente Luitpold). Tras siete años de trabajo, la obra llegó a buen término y el templo fue consagrado el 13 de octubre de 1895. Destruida durante los bombardeos de 1944, fue reconstruida según los modelos originales entre los años 1947 y 1953. Su estilo neo-románico intenta seguir los modelos del llamado románico imperial alemán.
¿Quién era san Benno? En español le llamamos San Benón de Meissen. La ciudad de Meissen se encuentra en Sajonia, muy lejos de Munich. Fue a causa de los destrozos provocados por los luteranos, por lo que las reliquias del santo fueron trasladadas hasta el sur de Alemania. Aquí terminó por ser declarado Patrón principal de la ciudad.
Tengo que pedir disculpas por las calidad del video: está hecho con un simple teléfono móvil. Con todo, he decidido mostrároslo tal cual. Como complemento, os dejo un Enlace a un video con fotos de buena calidad del templo.
La oración está hecha sobre el himno Urbs Ierusalem, una pieza que rezamos en el Oficio de la Consagración de un Templo, y que nos habla de la magnificencia del edificio como pálido reflejo de la gloria de la Jerusalén celestial.


jueves, 17 de enero de 2013

Monasterio de san Antonio, Egipto


El desierto parece ser el lugar por excelencia para retirarse y empeñarse en la búsqueda y encuentro con Dios. Así lo fue para el pueblo de Israel, los profetas, el mismo Cristo y los primeros monjes. Un apasionante lugar donde la aridez se convierte en dulzuras y el silencio en celeste melodía. Un lugar no ausente de infinitas pruebas, pero también colmado de seguras y divinas recompensas.

Los monasterios más antiguos de Egipto se encuentran al este del país en los terrenos cercanos al Mar Rojo. El de san Antonio y san Pacomio. Pero hoy nos ocuparemos del primero.

Tras la muerte de san Antonio, el monasterio levantado en su honor es el mas antiguo del Egipto cristiano, datado del 356. El monte, el-Qalzam resguarda este monasterio y se eleva de manera majestuosa hacia lo alto de la misma forma que se elevan las plegarias de los buscadores de Dios que habitan en este lugar, posiblemente, el monasterio más antiguo del mundo.

San Antonio, en el año 285, con treinta y cinco años de edad, interrumpió las escasas relaciones humanas que mantenía y se retiró hacia el este, junto al Mar Rojo, en las montañas de Pispir. Allí se estableció junto a una fuente y cerca de una vieja fortaleza abandonada. Era un lugar donde abundaban las serpientes. Este lugar le estaba prohibido a todo asistente por la peligrosidad de las serpientes y solo de vez en cuando se le acercaba un fiel amigo a llevarle algunos víveres. Aquí, en las montañas de Pispir estuvo algunos años, extendiéndose por todo el contorno la fama de su santidad, lo que consecuentemente atrajo a otros muchos eremitas solitarios que querían vivir junto a él. Estos ermitaños se organizaron viviendo en comunidad en dos monasterios construidos por ellos mismos y que pusieron bajo la dirección espiritual de Antonio. Aquí, en el año 307 recibió la visita de San Hilarión, también monje ermitaño.

En el año 311, durante la persecución de Maximiano, Antonio abandonó la soledad y marchó a Alejandría para servir y defender, para sostener en la fe, a la comunidad cristiana alejandrina. Estuvo expuesto a la indiscreción del pueblo y por lo tanto, puso en peligro su vida, por lo que meses más tarde tuvo el deseo de vivir nuevamente en completa soledad. Así que se marchó adentrándose en el desierto de la Tebaida oriental en el Alto Egipto. Se unió a una caravana de mercaderes árabes y caminando durante tres días y tres noches, llegó al Mar Rojo. Se afincó en una montaña distante unas treinta millas del río Nilo, en Coltzum o el-Qalzam, donde vivió el resto de su vida. De allí, solo salió una vez para visitar a San Pablo el Primer Eremita.

Hasta quince años antes de su muerte no admitió la presencia estable de sus dos discípulos, Amathas y Ma­cario. Finalmente, el 17 de enero del año 356, luego de haber anunciado su muerte y haberse hecho prometer por sus dos discípulos que a nadie reve­larían el secreto de su tumba, a fin de evitar honores póstumos, entregó santísimamente su alma a Dios. Contaba al morir ciento seis años de edad.

lunes, 14 de enero de 2013

Poitiers



Si uno piensa en Poitiers, Francia, le vendrá a la memoria sus magnificas iglesias medievales, como san Juan, san Hilario o la que puede descansar en nuestra mente sería, la magnifica catedral de Nuestra Señora, o la singular Leonor de Aquitania. El camino de Santiago o Venancio Fortunato y su famoso himno Vexila Regis que fue cantado por primera vez en la procesión (19 de noviembre de 569) cuando una reliquia de la Vera Cruz , enviado por el emperador bizantino  Justino II a petición de Santa Radegunda, se realizó con gran pompa desde Tours a su monasterio de la Santa Cruz en Poitiers. Quizás le vengan a uno a la memoria, Clodoveo y Alarico guerreando en luchas visigodas, o  imaginemos a Carlos Martel heroicamente junto al ejército de los francos batirse contra los árabes defendiendo así su tierra y su fe. Allí se batieron los siete mil soldados del Príncipe Negro, Eduardo de Woodstock, Príncipe de Gales, contra la caballería francesa de Juan II; derrotados éstos tras la épica batalla, cedieron su territorio a quien llego a vivir en Castilla y fue aliado de Pedro I contra Enrique de Trastámara.
Pero la ciudad Romana que fuese capital de la Aquitania, me llama hoy la atención debido a su gran obispo san Hilario, quien en el siglo IV supo defender su fe de manera firme contra el arrianismo, se enfrentó al emperador Constancio II y siguió firme en la verdad, a pesar de su destierro en  Frigia, más allá del Mar Negro. Allá estuvo desterrado por cuatro años. Pero este destierro que le hizo sufrir mucho, le fue también muy provechoso porque allá aprendió el idioma griego y pudo leer los libros de los más grandes sabios cristianos de la antigüedad en Oriente, y aprendió también la costumbre de entonar muchos cantos durante las ceremonias religiosas. Durante su estancia en Oriente adquirió una importantísima documentación para los famosos libros que luego iba a publicar en favor de la religión.
En Constantinopla fue invitado a un Concilio de los arrianos, y allí habló tan maravillosamente explicando la divinidad de Jesucristo, que los herejes pidieron al emperador que lo expulsara otra vez hacia occidente, porque podía convencer a toda esa gente de que Jesucristo sí es Dios. Y el gobernante dio el decreto de su destierre a Francia.
Allí  redactó su libro más famoso llamado "La Trinidad". También publicó un Comentario al Evangelio de San Mateo y un Comentario a los Salmos.
Otra gran obra de San Hilario fue reunir un grupo de personas fervorosas y enseñarles a vivir en comunidad, lejos de lo mundano, dedicándose a la oración, a la penitencia, al trabajo y a la lectura de la Sagrada Biblia. Un primer monacato al que se unió el gran san Martín de Tours.
Fue declarado Doctor de la Iglesia, por sus grandes aportaciones para la definición del dogma trinitario, en 1851 por el papa Pío IX. Su fiesta se celebra el 13 de enero.
En fin una ciudad, que alberga no solo un gran santo que defendió la Verdad a pesar de la adversidad, sino un lugar sacro por donde tantos peregrinos han pasado y rezado. Un lugar que invita a cantar:

Vexilla Regis pródeunt:
fulget crucis mysterium
qua vita mortem pértulit,
et morte vitam prótulit.
O crux, ave, spes unica.
Hoc passionis tempore
piis adauge gratiam,
reisque dele crimina.

Las banderas del Rey avanzan: refulge el misterio de la cruz en que la vida padeció muerte y con su muerte nos dio vida. ¡Salve, oh cruz, única esperanza nuestra! En este tiempo de pasión aumenta en los justos la gracia y borra los crímenes de los reos.

domingo, 13 de enero de 2013

Cesarea de Filipo



Situada a 40 km norte del Mar de Galilea y en el pie del monte Hermón, Cesarea de Filipo es hoy Banias, una pequeña villa en un lugar placentero a 900 pies sobre el nivel del mar, al pie del Monte Hermón y a 45 millas al suroeste de Damasco, capital de la villa. Es el lugar de uno de los más grandes manantiales que alimenta al río Jordan y esta abundante reserva de agua ha hecho de ella un área bastante fértil.

Hoy traigo a colación éste lugar sacro por varios motivos. Primeramente por la fuente que alimenta al mismo Jordán en el que  Cristo es bautizado. Él que es la fuente de la vida, purifica el elemento de la fuente para que con ella, la gracia fluya amablemente por todo el pueblo como corre santificado ese rio en el que el salvador es proclamado por el Padre, Hijo muy amado.  

Este lugar fue también el escenario de un bautismo, el del centurión Cornelio con su familia como podemos leer en el cap. 10 de los hechos de los apóstoles. En ese momento, apareció el Espíritu Santo y se posó sobre todos los presentes, judíos y gentiles. Entonces Pedro dijo: ¿Puede acaso alguien negar el agua del bautismo a éstos, que recibieron el Espíritu Santo como nosotros? Y ordenó que los gentiles allí presentes fuesen bautizados en nombre de Jesús.

También aquí Pedro confeso a Cristo como Mesías. Llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo y preguntaba a sus discípulos: ¿Quién dice la gente que es el Hijo del Hombre? Simón Pedro tomó la palabra y dijo: Tú eres  el Mesías, el Hijo de Dios vivo. Jesús; le respondió: ¡Dichoso tú, Simón hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso sino mi padre que está en el cielo…(Mt 16, 13-20), así como el Padre en el Bautismo lo proclama, éste es mi Hijo, el amado, el predilecto.

Aquí fue donde la hemorroisa fue curada por Cristo (Mt. 9,29) una enfermedad que en su tiempo se consideraba avergonzarte. La función de la túnica de Cristo se interpreta como un símbolo de la salvación. No es la ropa la que salva a la mujer, sino la intención de su fe. Según Eusebio ella erigió frente a su casa un monumento de bronce que representaba la sanación que obtuvo de Jesús; en este grupo Juliano el Apóstata sustituyó su propia estatua por la de Cristo.

Hoy es un lugar de sufrimiento por los conflictos y agresión a cristianos en Siria, ya que desde 1886 Banias ha sido la sede de un obispo católico griego (melquita), con cerca de 4,000 fieles y 20 sacerdotes. Su primer titular Monseñor Géraïgiry, construyó cierto número de iglesias y 26 escuelas; la residencia del obispo está cerca de Banias en Gedaïdat-Margyoum.
El Ejército apoyado por tanques intervino el sábado en Banias, uno de los focos de la revuelta democrática en Siria,…, El Ejército ocupó también el castillo de Marcab, una antigua fortaleza de los cruzados desde la que se domina Banias… Las protestas políticas, que comenzaron a mediados del pasado marzo, han reavivado las tensiones sectarias por primera vez en décadas en Siria, donde existen también importantes minorías cristiana y kurda. (Noticias de mayo del 2011)

sábado, 12 de enero de 2013

Ubi laudaverunt te patres nostri, quam desolata est.


El Martirologio Romanao nos trae hoy un gran monje, “en el monasterio de Rievaulx, también en Northumbria (hoy Inglaterra), san Elredo, abad, el cual, educado en la corte del rey de Escocia, ingresó en la Orden Cisterciense, siendo maestro eximio de la vida monástica y promoviendo constante y suavemente, con su ejemplo y sus escritos, la vida espiritual y la amistad en Cristo (c. 1166).”

Rievaulx Abbey fue fundada en 1132 por doce monjes de Claraval Abbey como una misión para la colonización del norte de Inglaterra y Escocia. Fue la primera abadía cisterciense en el norte. Con el tiempo se convirtió en una de las grandes abadías cistercienses de Yorkshire, en segundo lugar después de la Abadía de las fuentes (Wardon Abbey). La ubicación remota era ideal para los cistercienses, cuyo deseo era seguir una estricta vida de oración y la autosuficiencia con poco contacto con el mundo exterior. Se convirtió en uno de los más grandes y más ricos monasterios de Inglaterra, con 140 monjes y muchos más hermanos laicos, recibiendo concesiones de tierras por un total de 6.000 acres (24 km ²) y el establecimiento de casas hijas en Inglaterra y Escocia.

Rievaulx hoy solo es sombra de lo que fue y ha quedado como recuerdo en un pequeño pueblo cerca de Helmsley en North Yorkshire, Inglaterra. Se encuentra en lo que fue el patio interior de Rievaulx Abbey, cerca del río Rye . El patio interior del monasterio contiene edificios como la sala de cocción, panadería y casa de huéspedes. Su nombre se originó como Rye (el río) y val o valle

La abadía fue cerrada como parte de la disolución de los monasterios por Enrique VIII en 1538 y los edificios fueron comprados por el duque de Rutland. Listos para continuar con la industria de fundición de hierro, que había sido llevada a cabo por los monjes. Esto continuó hasta su interrupción durante la Guerra Civil (1642-1651) , con el abandono de la producción en 1647. Después paso a la familia Duncombe. En la década de 1750 Thomas Duncombe III embelleció la finca, con el gusto de la época, mediante la construcción de las terraza de Rieveaulx en la que edificó dos templos de estilo griego que miran a la abadía. Hoy las ruinas de la abadía están al cuidado de Patrimonio Inglés. En 1983, el ex primer ministro Harold Wilson , un hombre de Yorkshire, adoptó el título de barón Wilson de Rievaulx. 

Un lugar espiritual, donde tantos hombres cantaron las alabanzas divinas, hoy esta desolada, donde el "ora et labora" convivieron por siglos guardando sus intima clausura, hoy se ofrece a cámaras indiscretas. Así como tantos ellos en nuestra querida y descristianizada Europa, están abandonados, como dice el salmo 79 "¿Por qué has derribado su cerca para que la saqueen los viandantes, la pisoteen los jabalíes y se la coman las alimañas?"

miércoles, 9 de enero de 2013

Cielo


Si  preguntara a alguien si cree que hay un lugar llamado cielo, la mayoría de los preguntados probablemente dirían que sí. Pero si les pregunto cómo es o cómo se puede llegar a el, imagino que recibiría diversas y variadas respuestas.

Permítanme que hoy cite éste lugar a modo simbólico y deje éste a vuestra propia meditación, como me ha sucedido a mi hoy al leer Is 63 15 - 64 4a

El hecho de que la Escritura hable de Dios en imágenes y símbolos espaciales nos deja abierta la posibilidad de hablar del cielo de esta manera.

Como la cuestión de dónde está el cielo no puede ser contestada, dice el Schmaus , se pospone también en importancia a la cuestión de qué es el cielo. Pues la Sagrada Escritura describe el cielo más como una forma determinada y perfecta de existencia humana que un lugar determinado. Lo llama reino de Dios, vida eterna, vida dada por Dios, paz sin tormento, salvación eterna, alegría y corona de la gloria, banquete con Dios, banquete nupcial. herencia de Cristo, luz y descanso, contemplación de Dios.

El Cielo, según el Catecismo de la Iglesia Católica, (1023-1029, 1721-1722)  es la participación en la naturaleza divina, gozar de Dios por toda la eternidad, la última meta del inagotable deseo de felicidad que cada hombre lleva en su corazón. Es la satisfacción de los más profundos anhelos del corazón humano y consiste en la más perfecta comunión de amor con la Trinidad, con la Virgen María y con los Santos. Los bienaventurados serán eternamente felices, viendo a Dios tal cual es.

El Papa Benedicto XVI negó que, para los cristianos, el “cielo” sea entendido como un lugar concreto en el más allá y aclaró que, en realidad, ese concepto pretende resumir la fe en la salvación del alma después de la muerte.

Todos nosotros somos bien conscientes que con el término ‘cielo’ no nos referimos a algún lugar del universo, a una estrella o algo similar: no. Nos referimos a algo mucho más grande y difícil de definir con nuestros conceptos humanos

Con este término cielo –agregó- queremos afirmar que Dios se hizo cercano a nosotros, no nos abandona ni siquiera en y más allá de la muerte sino que tiene un lugar para nosotros y nos dona la eternidad”.

La bóveda celeste, el firmamento, es el símbolo que desde siempre se ha utilizado para representar el Cielo. Un símbolo que significa lo trascendente, lo inaccesible, lo infinito. Un cielo que si lo observamos al amanecer, cuando el alba parece rasgar la noche o, al atardecer, cuando las llamas parecen abrasar el firmamento nos deja sin palabras. Un cielo que en una clara mañana de verano o en una noche estrellada, forzosamente nos llena de admiración y sobrecogimiento ante la belleza y la grandiosidad del mismo. Sin embargo, el Cielo, sobrepasa esta pasajera realidad para hacerse realidad eterna en Dios. 

domingo, 6 de enero de 2013

Colonia


Esta estrella resplandece como llama viva y revela a Dios, Rey de reyes; los magos la contemplaron y ofrecieron sus dones al gran Rey.            

(Antífona del Oficio de Epifanía)



Ella se eleva hacia el cielo como el gran deseo de quien quisiera contemplar o alcanzar, con sus manos pétreas, al mismo Dios. El mismo Dios que contemplaron los que allí esperan el rescate de ese mismo Señor que, a pesar de su pequeñez, admiró con su venida a toda la humanidad. 

Ella está ahí como un bosque de cipreses que se levanta junto a la corriente, ese árbol que no perderá nunca la lozanía, a pesar de la dificultad, el que está al borde de la acequia y no se marchitan sus hojas, que diría el profeta Jeremías, (Jr 17, 5-8) y nos recuerda el Salmo 1.

Ella es la que a pesar del tiempo ha perdurado, la que a pesar de su historia ha permanecido, siempre inacabada y siempre en marcha, siempre nueva y llena de antigua novedad en sus seiscientos años de continua renovación y construcción. En todo su esplendor a pesar de sus su años de fatigas y luchas.

Ella, arropada de antiguos mundos, se abre al futuro de las cosas nuevas, porque está ahí resplandeciente, como la estrella que guió a sus moradores (Mt 2, 2), como una esposa adornada para su esposo (Is 61, 10) o una novia que espera el encuentro con su amado (Is 62, 5). Así es ella, la que resplandece, la nueva Jerusalén, la ciudad santa. (Ap 21, 2)

Ella es la que hoy atrae nuestra mirada llena de curiosidad y sorpresa, como la de aquellos que corrieron tras las promesas. Porque de la tumba se alzó un día el que vive, y del cielo surgió un astro; así nos alzaremos todos los que creemos en el Hijo de Dios, Jesucristo, como se alzarán los que creyeron en Él y los que le adoren, los que allí yacen esperando la resurrección que todos esperamos. 

Ahí están con ella y en ella, nuestros admirados, imaginados, soñados y como no, envidiados, ya que vieron y adoraron al Dios hecho carne en un pesebre. Ellos, Melchor, Gaspar y Baltasar, que descansan hoy ahí, en un magnifico Relicario, En ella y con ella, la Iglesia santa de Dios, hoy vista aquí en la gran catedral de Colonia.


sábado, 5 de enero de 2013

Moreruela

Ecce civitas Sancti facta est deserta
Sion deserta facta est, Jerusalem desolata est,
Domus sanctificationis tuae et gloriae tuae,
Ubi laudaverunt te patres nostri.


Durante el tiempo de Adviento canta la Iglesia un himno, Rorate caeli desuper, cuyo texto parece que fue escrito en el siglo IV por el poeta romano de Calahorra Aurelio Prudencio. Es una bellísima composición musical, que pretende infundir esperanza, ne medio de una situación de desolación, muy de acuerdo con la espiritualidad de este tiempo litúrgico, que nos prepara para la llegada salvadora del Señor.
La estrofa transcrita al comienzo puede traducirse así: La Ciudad Santa ha quedado desierta, Sión ha quedado desierta, está desalada Jerusalén, lugar de tu santidad y de tu gloria, donde te alabaron nuestros padres.
Estas últimas palabras cuadran perfectamente al estado ruinoso que presenta el que fuera importante monasterio de Moreruela. De origen humilde, arranca su historia en los desconocidos tiempos de la emigración mozárabe hacia el Reino de León. En un principio estuvo bajo la advocación del Apóstol Santiago. A finales del siglo XII adoptó la reforma cisterciense, mostrando su renovada arquitectura un esplendor hoy completamente perdido.
En la actualidad, es un lugar casi desconocido, al que se accede por una pequeña carretera, entre Benavente y Zamora.
Que los monjes que allí alabaron al Señor, que con toda seguridad entonaron el Rorate, disfruten en la misericordia del Señor los bienes de su eterna belleza, cuyo reflejo nos dejaron en su admirable templo y monasterio.