Calahorra no solo es una de las sedes episcopales más antiguas de España, sino de la entera Cristiandad. La próspera ciudad romana de Calagurris fue testigo del nacimiento de una incipiente comunidad cristiana, regada con la sangre de los mártires Emeterio y Celedonio. El poeta hispano.romano Aurelio Prudencio cantó, junto a la de otros muchos mártires cristianos, su gloria inmortal. Sobre el lugar de su martirio, se erige esta catedral, que visitamos con el siguiente reportaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario