miércoles, 19 de junio de 2019

El Eremo de Camaldoli


Hoy, día de san Romualdo, queremos pasar por el lugar que el mismo fundó y dedicó a la búsqueda de Dios, al silencio y la oración. Un lugar donde el hombre se retira entre el silencio del bosque y alaba a Dios, su creador entre el canto de las aguas y los pájaros. Camaldoli es una localidad conocida en el mundo entero por albergar en su zona dos de los más importantes lugares de culto de toda Toscana: El Monasterio y El "Èremo" o Eremotorio de Camaldoli. Dichos antiguos complejos religiosos están situados en la provincia de Arezzo, en la zona de Casentino, en un valle rodeado por un espléndido bosque protegido. Una fracción de ese bosque pertenece a los monjes Camaldulenses quienes, hoy en día rigen ambos emplazamientos monásticos.

El Monasterio se encuentra junto a la carretera y el Eremotorio está emplazada en un encantador y solitario lugar de su área boscosa. El Eremitorio y el Monasterio se fundaron en el siglo XI. A principios de ese siglo, San Romualdo llegó a lo que entonces era un valle desierto y el Conde Maldolo le donó un área de su territorio para que pudiera aislarse del mundo. Con la aprobación del Obispo de Arezzo, fundó la Orden de los Monjes Camaldoleses, observantes de la Regla de San Benito. 

Primero, fundó el "Èremo" dedicado a la vida contemplativa.  Unos años después, restauró un antiguo edificio y lo convirtió en refugio de peregrinos. Entre 1080 y 1085, el refugio, completamente rehabilitado y agrandado, pasó a ser el Monasterio, designado para mantener una vida religiosa activa que, a largo de los siglos, ha impulsado un preclaro desarrollo humanístico e intelectual en Italia y en el extranjero.

La Orden de los Camaldoleses ha tenido distintos miembros insignes, tales como Guido di Arezzo, quien inventó la notación musical vigente hoy en día; Graciano, quien asentó las bases de la ley canónica;  Lorenzo Monaco,  prestigioso pintor del siglo XV; el eminente filósofo y humanista Ambrogio Traversari, así como Niccolò Malerbi quien, en el siglo XV, publicó la primera traducción al italiano de la Biblia. Dante Alighieri celebró a tres de sus miembros en el Canto del Paraíso de la Divina Comedia: Romualdo, Graciano y Damiano. Al día de hoy, el Monasterio y el Eremitorio siguen siendo lugares de peregrinación, así como de alto interés histórico y artístico. Dejamos aquí un par de visiones del eremitorio camaldulense en medio del silencio.

martes, 18 de junio de 2019

Monasterio de la Trinidad y San Sergio (Rusia)


El monasterio de la Trinidad y San Sergio (en ruso Тро́ице-Се́ргиева Ла́вра; Тро́ице-Се́ргиева Ла́вра o Tróitskaya Sérguieva Lavra) en la ciudad de Sérguiev Posad (antiguo Zagorsk) es un importante monasterio ruso y centro espiritual de la iglesia ortodoxa rusa.


Sérguiev Posad se encuentra a unos 70 kilómetros al noreste de Moscú en la carretera que va a Yaroslavl. Actualmente alberga a únos 300 monjes. Según la Unesco, que lo declaró Patrimonio de la Humanidad en 1993, se trata de «un buen ejemplo de monasterio ortodoxo en funcionamiento, con rasgos militares típicos de los siglos XV al XVIII, período durante el que se desarrolló.


La iglesia principal del Lavra (monasterio), la catedral de la Asunción (que recuerda a la catedral del Kremlin del mismo nombre) contiene la tumba de Borís Godunov». Destaca, el famoso icono de la Trinidad, obra de Andréi Rubliov.

lunes, 17 de junio de 2019

Historia de Corinto


Estamos leyendo en la Eucaristía la Segunda Carta del Apóstol san Pablo a los Corintos, es decir, a la comunidad cristiana asentada en esta ciudad griega. Según la mitología griega, la Antigua Corinto fue fundada con el nombre de Éfira por Sísifo, quien fue su primer rey, y con sus sucesores. Ornitión continuó la dinastía hasta su derrocamiento por los dorios.

En el siglo VIII a. C. se hizo independiente. La ciudad se llamaba Efira, y más tarde su nombre cambió a Corinto, en una época desconocida, probablemente durante la conquista doria. El nombre se hace derivar de Corinto, hijo de Zeus. El heráclida Aletes, hijo de Hipotes es el legendario primer rey dórico de la ciudad donde los dorios estaban al comienzo una minoría dirigente; los no dorios fueron admitidos más tarde a la ciudadanía. Aletes y sus descendientes fueron reyes durante doce generaciones y 327 años, desde el 1074 a. C., según la fecha tradicional (treinta años después de la conquista doria). Según Pausanias, Primnis fue el último descendiente de Aletes, y Baquis inició una nueva dinastía también heráclida, pero Diodoro Sículo dice que todos fueron descendientes de Aletes, pero que Baquis fue tan célebre que su nombre se dio a la dinastía Baquíada.

Corinto, ya en la antigüedad, fue una importante ciudad comercial, donde llegaron a establecerse los fenicios para dedicarse a lo que mejor hacían: el comercio. Fue una de las primeras ciudades griegas en utilizar la moneda. Éstas eran muy importantes debido a la actividad principal de la ciudad. Las primeras de ellas fueron acuñadas en el siglo VII a. C. Tenían diversos motivos, figuras mitológicas, animales y otras acompañadas de pequeños símbolos que las distinguían. En esta ciudad se celebraban los juegos Ístmicos, de similares características a los celebrados en Olimpia aunque menos famosos que éstos.

En el 635 a. C. la colonia de Corcira derrotó a su metrópoli en una batalla naval, pero después fue nuevamente sometida. La única colonia al este del golfo Sarónico fue Potidea en la Calcídica. A Periandro le sucedió su nieto Psamético que reinó sólo tres años y fue derrocado por los espartanos que instituyeron un gobierno aristocrático y Corinto fue un aliado permanente de la confederación lacedemonia. En un período posterior los corintios rechazaron ayudar a Cleómenes I, rey de Esparta a restaurar a Hipias de Atenas, y enviaron 20 trirremes a Atenas para ayudarla en la guerra contra Egina.


Pero después de la Guerras Médicas, Megara se alió con Atenas y los corintios entraron en guerra con Megara, territoro que invadieron, pero fueron derrotados por el estratego ateniense Mirónides (457 a. C.). Después se firmó la paz, pero la enemistad con Atenas siguió, sobre todo por la ayuda de ésta a la ex colonia de Corcira, que fue una de las causas de la Guerra del Peloponeso. Durante esta guerra la flota peloponesia fue básicamente corintia. Con la Paz de Nicias del 421 a. C., los corintios no se quisieron sumar e intentaron configurar otra liga con Argos, Mantinea y Élide, pero pronto volvió a formar alianza con Esparta, que se mantuvo hasta el final de la guerra. Cuando Atenas se rindió después de la batalla de Egospótamos, los corintios y beocios pidieron arrasar la ciudad derrotada, pero el espartiata Lisandro no lo consintió.

La hegemonía espartana pronto se mostró más opresiva que la ateniense, de modo que los corintios, junto a los argivos, atenienses y beocios configuraron una coalición que, sustentada en las profundas arcas persas, hizo frente al imperialismo espartano en la llamada Guerra de Corinto (395-386 a. C.), buena parte de la cual fue dirimida en su territorio. En el verano de 394 tuvieron lugar dos de las mayores batallas hoplíticas del mundo griego antiguo, en Nemea y Coronea, ambas vencidas «técnicamente» por los lacedemonios, que no obtuvieron ventajas estratégicas. En los siguientes años la Corintia fue sometida a una guerra de depredación y de pillaje que provocó el estallido de una stásis o conflicto civil en el seno de la ciudadanía, alentada por los intereses de los estados hegemónicos. Según Jenofonte, los argivos aprovecharon esta situación para anexionarse Corinto, pero más probablemente el filolaconio Jenofonte convirtió en sinecismo o unión política la presencia de una guarnición militar argiva en el Acrocorinto, la ciudadela o acrópolis corintia. De cualquier forma la Paz del Rey o Paz de Antálcidas, alcanzada en la primavera de 386 a. C., acabó con cualquier proyecto argivo de anexión sobre Corinto al evacuar la guarnición del Acrocorinto; además de permitir el retorno de los exiliados corintios, obviamente filoespartanos, que procuraron la fidelidad de Corinto hacia Esparta en los años sucesivos.

En la guerra que siguió entre Tebas y Esparta, los corintios fueron leales a Esparta, pero el territorio hubo de firmar una paz separada. La ciudad permaneció independiente bajo gobierno oligárquico. Timófanes intentó conseguir la tiranía, pero fue muerto por su propio hermano Timoleón (344 a. C.). En el año 338 a. C. la ciudad fue conquistada por Filipo II de Macedonia, que la hizo el centro de la Liga de Corinto, controlada por él mismo. Después de la batalla de Queronea los macedonios establecieron una guarnición en el Acrocorinto. Esta guarnición fue sorprendida por el líder de la Liga Aquea, Arato, que incorporó Corinto a dicha liga (243 a. C.).

En 223 a. C., la ciudad fue ocupada por Antígono III Dosón que la quería como base contra la Liga Etolia y Cleómenes. Filipo, hijo adoptivo de Antígono la conservó hasta que fue derrotado en la batalla de Cinoscéfalas (197 a. C.) y Corinto fue declarada ciudad libre por los romanos y unida a la Liga Aquea otra vez. Una guarnición romana se estableció en el Acrocorinto. Corinto fue después capital de la Liga y fue allí donde los embajadores romanos fueron maltratados lo que provocó el ultimátum del Senado Romano a la Liga. Derrotada ésta, el cónsul romano, Lucio Mummius Achaicus entró en Corinto sin oposición y se vengó de la ciudad y sus habitantes: los hombres fueron ejecutados y las mujeres y los niños fueron vendidos como esclavos; las obras de arte fueron llevadas a Roma y la ciudad fue saqueada y destruida (146 a. C.). Continuó despoblada y destruida unos cien años y su territorio fue entregado a Sición o fue hecho ager público. El comercio se trasladó a Delos.

En el año 46 a. C., Julio César, decidió reconstruir la ciudad y envió una colonia de veteranos y hombres libres (Colonia Julia Corintia o Colonia Juli Corint o Colonia Julia Corintia Augusta, según las diferentes inscripciones). La ciudad se recuperó (44 a. C.) y cuando Pablo de Tarso la visitó en el siglo I, era una ciudad importante, capital de la provincia de Acaya, y residencia del procónsul de Acaya Junius Gallio. Pablo de Tarso fundó un grupo cristiano el año 50, al cual dirigió sus epístolas. En el siglo II, fue visitada por Pausanias y tenía numerosos edificios. Continuó siendo la capital de la provincia romana de Acaya durante todo el Imperio romano. En 395 fue saqueada por Alarico I y en 521 fue destruida por un terremoto.

jueves, 13 de junio de 2019

Padua


La Basílica de San Antonio de Padua es un templo religioso de la ciudad italiana de Padua, construido entre los años 1238 y 1310. Su núcleo original fue la Iglesia de Santa María Madre del Señor, Sancta Maria Mater Domini, donde se instaló el convento franciscano en el cual fue sepultado San Antonio de Padua, hecho que originó una fervorosa devoción a sus restos por parte de los católicos.

En la plaza se encuentra el magnífico monumento ecuestre a Gattamelata de Donatello. Además en el interior de la basílica realizó este mismo escultor, el Crucifijo de bronce, que Boito colocó años más tarde en el altar mayor. Para este mismo altar, Donatello creó siete estatuas que representan a la Virgen con Niño y los santos Francisco, Antonio, Justina, Daniel, Luis y Prosdocimo.

Visitar Padua no solo es un recreo para los sentidos donde el disfrute de lo artístico está asegurado sino un posibilidad de trascender a lo Alto. Venerando a san Antonio nos adentramos, a través de la belleza que rodea su sepulcro, en la búsqueda de aquel que traspasa toda materialidad, Dios mismo, a quien el santo busco y predicó durante toda su existencia terrena.

Para un mayor disfrute de este santo lugar podemos ver la WEB de la basílica y dos vídeos sobre el conjunto de la ciudad de Padua y sobre la Basílica.




martes, 11 de junio de 2019

Monasterio de San Bernabé (Chipre)

Monasterio de San Bernabé - Iglesia

La memoria de san Bernabé se ha conservado especialmente en su tierra, Chipre. De hecho, sobre su tumba, se levanta el Monasterio de San Bernabé. La tumba de San Bernabé en la cripta constituye un importante centro de peregrinación para los ortodoxos griegos, aunque se encuentra en la parte turca de la isla de Chipre.

Unos ocho kilómetros al norte de Famagusta y dos kilómetros al oeste de Salamina está el Monasterio de San Bernabé y la tumba en la que fue enterrado, siendo el mártir venerado como santo nacional chipriota. El complejo incluye la iglesia del monasterio, el edificio del monasterio con el Museo de iconos y de la arqueología y la tumba de la Santa Iglesia.

Tumba de san Bernabé

La parte más antigua del edificio fue construida en el siglo décimo; posteriormente, el año 1756, fue renovada la iglesia por el Arzobispo Philotheos. Después de la salida de los últimos tres monjes en 1976 la iglesia del monasterio se convirtió en Museo de los Iconos, los edificios del monasterio se utilizan como un museo arqueológico.

domingo, 9 de junio de 2019

Pentecostés en Silos

Pentecostés - Siglo XI - Primer Maestro de Silos
Piedra tallada y originariamente policromada
Santo Domingo de Silos

En el día santo de Pentecostés, nos vamos hasta el claustro románico de Santo Domingo de Silos, para alabar la gloria del Señor, que envía el Espíritu Santo sobre nosotros.

Dios nuestro, que por el misterio de esta fiesta
santificas a tu Iglesia extendida entre las naciones,
derrama sobre toda la tierra
los dones del Espíritu Santo
e infunde en el corazón de tus fieles
las maravillas que obraste
en los comienzos de la predicación evangélica.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.

domingo, 2 de junio de 2019

Ascensión en el Claustro románico de Silos

La Ascensión. Siglo XI. Primer Maestro de Silos
Piedra tallada y originariamente policromada
Santo Domingo de Silos

Viajamos hoy hasta el Claustro románico de Santo Domingo de Silos, para contemplar la escena de la Ascensión del Señor, y gozar junto a toda la Iglesia en el triunfo de Cristo, que ya es nuestro triunfo. Los apóstoles, con María en el centro, contemplan al Señor, que se va ocultando tras una nube que dos ángeles van subiendo hacia arriba.

San Agustín, en el cuarto tratado sobre la Primera Carta de San Juan afirma:

Creemos en Jesús, a quien no hemos visto. Lo anunciaron quienes lo vieron, quienes lo palparon, quienes escucharon las palabras de su boca. Y para convencer de esto al género humano, fueron enviados por él, no osaron ir por propia iniciativa. Y ¿adónde fueron enviados? Lo habéis oído al escuchar el evangelio: Id al mundo entero y proclamad el evangelio a toda la creación. Luego a todo el mundo fueron enviados los discípulos, confirmando la Palabra con signos y prodigios para ser creídos, pues predicaban lo que, habían visto.

Y nosotros creemos en quien no hemos visto y cuyo retorno esperamos. Todos cuantos lo esperan con fe, se alegrarán de su venida; los que no tienen fe, se sonrojarán cuando viniere lo que ahora no ven. Mantengámonos, pues, fieles a sus palabras, para no quedar confundidos cuando viniere. El mismo dice en el evangelio a los que habían creído en él: Si os mantenéis en mi palabra seréis de verdad discípulos míos. Y saliendo al paso de una posible pregunta: ¿Cuál será la recompensa?, añade: Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres.

Así pues, de momento nuestra salvación radica en la esperanza, no en la realidad; pues todavía no poseemos lo que se nos ha prometido, pero esperamos poseerlo en el futuro. Y el que lo ha prometido es fiel, no te engaña: lo importante es que no pierdas la esperanza, sino que esperes la promesa. En efecto, la verdad no conoce el engaño. Tú no seas mentiroso, profesando una cosa y haciendo otra; conserva la fe y él te mantendrá su promesa. Ahora bien, si tú no mantuvieres la fe, tú mismo te defraudas, no el que hizo la promesa.

Si sabéis que él es justo, reconoced que todo el que obra justicia ha nacido de él. Ahora nuestra justicia procede de la fe. La justicia perfecta sólo se da a los ángeles, y apenas si en los ángeles, si se les compara con Dios. No obstante, de darse una justicia perfecta en las almas o en los espíritus creados por Dios, ésta se da en los ángeles santos, justos, buenos, a quienes ninguna caída desvió, a quienes la soberbia no precipitó, sino que permanecieron siempre en la contemplación del Verbo de Dios, y que en ningún otro hallan su felicidad, sino en el que los creó. En ellos la justicia es perfecta; en nosotros, por el contrario, comenzó a existir por la fe según el Espíritu.

miércoles, 29 de mayo de 2019

El Areópago

El Areópago ateniense, también conocido como “La Colina de Ares” (" Ares", deidad griega de la guerra, que corresponde al Marte romano). Se trata de un inmenso monte ubicado al oeste de la Acrópolis de Atenas, lugar dónde se reunía el Consejo de aquella época. Está situado a 115 metros de altura en una zona rocosa de Atenas, Grecia, y separado del Acrópolis por un arroyo. Era un lugar muy importantes para los antiguos habitantes de Atenas. No se trataba de unedificio cubierto, sino de un lugar al aire libre, rodeado de gradas y asientos.


Otra motivo por el cual el lugar era de gran importancia en la actualidad y por lo tanto en el presente, era su aspecto mitológico.  Se creía que en ese lugar había sido juzgado y ajusticiado al dios Ares, por la intervención de Halhirrotios, hijo de Poseidón, porque se creía había violado a la hija de Ares, y que había sido condenado a pasar sus días en dicha colina. También, la leyenda decía que en el lugar había sido juzgado Orestes, por el asesinato de su madre Clitemnestra.

Con ese nombre se conocía también la corte suprema compuesta por los patriarcas de la ciudad (“aeropaguitas”), autoridades supremas en asuntos políticos y religiosos. También tenía mucha influencia en asuntos de educación. Es natural que semejante cuerpo tuviera interés en Pablo y en su nueva enseñanza. Allí fue donde Pablo pronunció un discurso que no consistió en una apología personal, como algunos han supuesto, sino en una catequesis dirigida a un auditorio enteramente nuevo. 

Cuando hablaba entre los judíos, tenía un punto de partida admitido por todos, que era la existencia del Dios de Israel, e incluso la aceptación de la Sagrada Escritura cuyos profetas anunciaban la venida de un futuro Mesías. Aquí, por el contrario,en Atenas tiene que partir de otro punto, que es posible que sea admitido por la mayoría de sus oyentes: que hay un Dios que hizo el mundo y todo lo que contiene.

El Dios que ha hecho el mundo y todo lo que hay en él no habita en templos hechos por manos de hombre, porque es el Señor del cielo y de la tierra. Tampoco puede ser servido por manos humanas como si tuviera necesidad de algo, ya que él da a todos la vida, el aliento y todas las cosas. Él hizo salir de un solo principio a todo el género humano para que habite sobre toda la tierra, y señaló de antemano a cada pueblo sus épocas y sus fronteras, para que ellos busquen a Dios, aunque sea a tientas, y puedan encontrarlo. Porque en realidad, él no está lejos de cada uno de nosotros. En efecto, en él vivimos, nos movemos y existimos, como muy bien lo dijeron algunos poetas de ustedes: “Nosotros somos también de su raza”. Y si nosotros somos de la raza de Dios, no debemos creer que la divinidad es semejante al oro, la plata o la piedra, trabajados por el arte y el genio del hombre. Pero ha llegado el momento en que Dios, pasando por alto el tiempo de la ignorancia, manda a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan. Porque él ha establecido un día para juzgar al universo con justicia, por medio de un Hombre que él ha destinado y acreditado delante de todos, haciéndolo resucitar de entre los muertos». Al oír las palabras «resurrección de los muertos», unos se burlaban y otros decían: «Otro día te oiremos hablar sobre esto». Así fue cómo Pablo se alejó de ellos. Sin embargo, algunos lo siguieron y abrazaron la fe. Entre ellos, estaban Dionisio el Areopagita, una mujer llamada Dámaris y algunos otros.
(Hch 17, 24-33)

martes, 28 de mayo de 2019

Llegada del cristianismo a Filipos

En aquellos días, la plebe de Filipos se amotinó contra Pablo y Silas, y los magistrados ordenaron que les arrancaran y que los azotaran con varas; después de molerlos a palos, los metieron en la cárcel, encargando al carcelero que los vigilara bien; según la orden recibida, él los cogió, los metió en la mazmorra y les sujetó los pies en el cepo. A eso de media noche, Pablo y Silas oraban cantando himnos a Dios. Los presos los escuchaban. De repente, vino un terremoto tan violento que temblaron los cimientos de la cárcel. Al momento se abrieron todas las puertas, y a todos se les soltaron las cadenas.


En 49 o 50, la ciudad de Filipos recibió la visita del apóstol Pablo. Acompañado de Silas, Timoteo y, quizás, de Lucas, predica por primera vez en suelo europeo y bautiza allí a una comerciante de púrpura llamada Lidia, en un río al oeste de la ciudad: había allí entonces una comunidad judía, y una sinagoga atestiguado por la epigrafía.


Pablo habría visitado la ciudad en otras dos ocasiones, en 56 y 57. La epístola a los filipenses dataría de 54-55 y testimonia el impacto inmediato de la palabra paulina. El desarrollo subsecuente del cristianismo en Filipos está bien atestiguado, sobre todo por una carta de Policarpo de Esmirna dirigida a la comunidad filipense hacia el 160, y por la epigrafía funeraria.

Inscripción del obispo Porfirio en la Basílica de Pablo

La primera iglesia atestiguada en la ciudad es de tamaño modesto y corresponde probablemente al origen de una casa de oración: esta Basílica de Pablo, identificada por una inscripción de un pavimento de mosaico, está datado hacia el 343, por la mención del obispo Porfirio, cuya presencia está atestiguada en el concilio de Sárdica ese año.

sábado, 25 de mayo de 2019

Huellas de san Beda el Venerable


El 25 de mayo, en el Monasterio de Jarrow pasó de este mundo a las manos misericordiosas del Creador san Beda el Venerable, uno de los monjes más significativos del monacato alto-medieval inglés.

Ruinas del Monasterio de San Pablo de Jarrow

El Monasterio de Jarrow formaba parte, junto con el Monasterio de Monkwearmouth, de una fundación monástica que se fue el centro cultural y de enseñanza del reino de Northumbria, en el siglo VII.

Fachada original del Monasterio de Monkwearmouth

Ambos monasterios tuvieron que sufrir los sucesivos ataques de vikingos y normandos, pero ello no fue óbice para que al amparo de sus muros se forjaran generaciones de monjes, entre los cuales destaca Beda. Sin embargo, la disolución final llegó en 1545, durante el reinado de Enrique VIII, cuya turbulenta vida y política desembocó en la ruptura del cristianismo británico respecto a la Iglesia Católica, naciendo así la confesión Anglicana.

Catedral de Durham

La tumba de San Beda el Venerable se encuentra desde en siglo XI en la Catedral de Durham. Estas son las últimas palabras que pronunció Beda, según el cronista, antes de su fallecimiento: Hora es ya de que vuelva a mi Creador, si así le agrada, a quien me creó cuando no era y me formó de la nada. He vivido mucho tiempo, y el piadoso juez ha tenido especial providencia de mi vida; es inminente el momento de mi partida, pues deseo partir para estar con Cristo; mi alma desea ver en todo su esplendor a mi rey, Cristo.



Tumba de san Beda el Venerable - Catedral de Durham

martes, 14 de mayo de 2019

Abadía de san Eucario y san Matias


A finales del cuarto siglo y principios de quinto comienza la vida "religiosa" en este lugar con una comunidad de clérigo. Entre el 450-58 se construye una iglesia y el monasterio.  Hacia el 975-77  pasa a ser un  monasterio benedictino y con el sentido de reforma de Lorena-Triers reconstruyen la iglesia y el monasterio. En 1111, se introduce la reforma de Hirsau, abadia en la Selva Negra ( Baden-Württemberg), que emana de la influencia de la abadía de Cluny. En 1127 la construcción de la Iglesia abacial y en 1148, con el Papa Eugenio III, se realiza el descubrimiento de los restos del apóstol Matías, y comienza el principio de la veneración de su sepulcro en este lugar. En 1211-1257, el abad Jacobo de Lorena, recibe el encargado de reformar los benedictinos de la provincia eclesiastica de Treveris, por orden del Papa Honorio III. Se construyen nuevos el claustro y parte del monasterio. De 1421 a 1439, el abad Juan Rode reformó las abadías benedictinas de las provincias eclesiásticas de Colonia y Tréveris y algunas de la diócesis  de Mainz. En 1458, se produce la anexión a la Congregación  de Bursfeld. En 1802, llega la disolución por el decreto dela secularización. En 1922 se produce la vuelta de la vida monástica con monjes benedictinos de Seckau en Austria con la ayuda de Maria Laach, Alemania. De 1941-1945, se produce la supresión de la abadía por el estado nacional-socialista. En 1945, regresa de nuevo la vida comunitaria.


La abadía de San Matías es un monasterio benedictino de origen románico. Es un lugar de peregrinaje desde el siglo XII, en que se descubrieron las reliquias del Apóstol San Matias, que aquí se encuentra enterrado.

Según la tradición, a continuación, los cristianos de Jerusalén lo sepultaron con honor y la emperatriz Santa Elena llevó las reliquias a Roma en el año 324 y son puestas en una urna de pórfido en el altar mayor de la Basílica de Santa María la Mayor de Roma. Una pequeña fue llevada a Padova, donde se encuentran en la iglesia de Santa Justina y otras fueron enviadas posteriormente a Trier, la ciudad más antigua de la actual Alemania.

Durante la restauración de la iglesia, las reliquias fueron descubiertas en el siglo XII y trasladadas a una abadía benedictina que tomó su nombre.

En la cripta estan enterrados los Primeros Obispos de Tréveris: San Valerio y San Eucario.


San Matias fue elegido por los Once como apóstol para ocupar el puesto de Judas, tal como atestigua el libro de los Hechos (Hch 1, 15-26). No sabemos mucho más acerca de su vida, ya que después de este relato Matías no vuelve a ser mencionado.

La tradición refiere que San Matías predicó el Evangelio en Etiopía. La literatura apócrifa (como por ejemplo los "Hechos de Andrés y Matías") refiere que Matías fue hecho prisionero por antropófagos, fue cegado, posteriormente curado y liberado por Andrés y finalmente murió decapitado. Por ello se le representa con diversos atributos: la espada, las piedras, la alabarda, la cruz y el hacha, siendo este último el más predominante.

Urna con los restos de san Matias

Por encargo de Santa Elena, sus reliquias fueron trasladadas a la ciudad de Tréveris (Trier) en Alemania. El Apóstol es patrono de esa ciudad, donde hay una basílica que lleva su nombre.

Sepulcro de San Matias, Treveris
Su fiesta se celebra el 14 de mayo, y fue elegida por estar cerca de Pentecostés, pues la elección del Apóstol se produjo después de la Asunción y antes de la venida del Espíritu Santo.

martes, 23 de abril de 2019

Tumba de san Jorge, Lod. Israel

Iglesia ortodoxa de san Jorge . Lod, Israel
La tumba de San Jorge se encuentra en la ciudad de Lod, conocida como Lida en la Biblia, que es donde San Pedro sanó al paralítico Eneas antes de viajar a la cercana Jope (actual Jaffa), donde levantó a Tabita de los muertos. Lod es ahora también la ubicación del aeropuerto de Ben Gurion, que queda muy cerca del sitio de la tumba.

El cuerpo de san Jorge fue sepultado en la población de su madre: Lydda, -Lod- también conocida como “Hagio Georgiopolis”. Su tumba todavía es venerada por los cristianos, principalmente por los cristianos ortodoxos griegos. La Iglesia de San Jorge es el principal santuario donde se venera el mártir San Jorge desde el siglo IV. La iglesia actual, construida en 1870, bajo el gobierno del imperio otomano y comparte espacio con la mezquita de El-Khidr.


En la inscripción de su tumba de san Jorge se lee en griego:  “San Jorge, portador del estandarte”.

Tumba de san Jorge en Lod, Israel
“San Jorge, portador del estandarte”






















lunes, 22 de abril de 2019

Evolución del Retablo Mayor de la Catedral de Palencia


Estamos contemplando estos días de Pascua tablas de Juan de Flandes que se veneran en Catedral de Palencia. Ya hemos visitado este Retablo de la Capilla Mayor del templo palentino. Hoy veremos la evolución de este Retablo. Muchos estudiosos e investigadores del tema han aportado documentación que permite ver la evolución y distintas obras que se llevaron a cabo en el retablo desde 1504 hasta 1609.

Después de los encargos previos y de haberse realizado las obras de arte requeridas, los elementos del futuro retablo pasaron a la espera de ser montados y colocados en la antigua capilla mayor pero no hubo lugar porque en 1509 el obispo Juan Rodríguez de Fonseca decidió trasladar esta capilla al lugar donde se encuentra ahora, espacio que estaba ocupado por el coro conventual. La nueva capilla mayor suponía un habitáculo mucho mayor por lo que hubo que replantearse el tamaño y posición de los elementos del retablo. La solución fue encargar el 19 de diciembre de 1509 al pintor Juan de Flandes una serie de pinturas en tabla que agrandarían en un cuerpo más en altura y dos calles en anchura. El trabajo de Juan de Flandes no se entregó hasta 1519.

Ese mismo año en el mes de enero el escultor Juan de Balmaseda firma un contrato para la ejecución de un Calvario de grandes proporciones que sería integrado en el ático del retablo. De este nuevo espacio se ocupa el palentino Pedro Manso, maestro de talla, firmando un contrato en 1522. Se requiere que tenga forma semicircular y que esté cerrado por una gran cornisa. En 1525 este proyecto sufre cambios y avatares entre los que se encuentra la retirada de cuatro escudos y el añadido en lo alto de toda una fila con las cabezas o bustos descrita anteriormente. En este año se contrata nuevamente todo el dorado y estofado del retablo. En las cláusulas del contrato se enumeran una gran cantidad de detalles a seguir para que el resultado final sea el de una magnífica obra de arte de gran calidad.

Desde mayo hasta septiembre de 1520 Alonso de Solórzano y Gonzalo de la Maza se ocuparon de una serie de reformas y del encajamiento para el Calvario. Todo ello va dando forma al actual retablo. En 1559 y siguiendo las recomendaciones del Concilio de Trento, el Cabildo decide colocar en el centro del retablo una imagen de su patrono San Antolín. Se sustituye así una tabla de Juan de Flandes con el tema del Calvario por la escultura de bulto redondo de este santo.


Entrado el siglo XVII se realizan una serie de reformas en toda la calle central y el primitivo San Antolín es sustituido por una talla de Gregorio Fernández de factura y rasgos muy al gusto de la época. Es de tamaño casi natural, con el cuello ligeramente curvado. Se remodela también la parte del tabernáculo, empezando por separar la mesa de altar para evitar el ahumado de las velas. En 1607 los escultores palentinos Juan Sanz de Torrecilla, Pablo de Torres y Alonso Núñez se encargan de los trabajos del nuevo tabernáculo. Dos años más tarde los pintores palentinos Francisco de Molledo y Pedro de Roda se comprometen a dorar la imagen de San Antolín de Gregorio Fernández y la parte donde va instalado el tabernáculo con la custodia y el Sagrario.

A finales del siglo XVIII y bajo el mandato del obispo Mollinedo se renueva el pavimento de toda la fábrica y se cubren los azulejos de la predela con paneles que imitan al mármol y al jaspe, todo decorado al estilo neoclásico propio del momento.

domingo, 21 de abril de 2019

Anástasis

Anástasis. Capilla de la Rotonada. Jerusalén

Anastasis (Aναστασις) es una palabra griega para la Resurrección de Cristo. A la basílica del Santo Sepulcro de Jerusalén también se la conoce como la Basílica de la Resurrección (Griego: Ναός της Αναστάσεως, Naós tis Anastáseos; Georgiano: Agdgomis Tadzari; Armenio: Surp Harutyun) o de la Anástasis (en griego, 'Resurrección').

El sepulcro es el centro principal de la basílica pero desde ayer y por siempre es mejor mirar no a la materialidad sino a lo espiritual y lo que ellos significa. la Iglesia oriental ha conservado ese significado pleno del lugar, no como el sitio de la muerte, nada desechable sino admirable y sobrecogedor del alma ante ante su creador, por quien éste muere, sino el sentido sublime, e incomprensible, que solo la fe suple las carencias de su comprobación.


Que Cristo fue depositado sobre esa piedra es claro debido a la evidencia, que Cristo resucito desde esa piedra es creíble por el testimonio y la escucha. Un testimonio que viene de quien vieron el sepulcro vació y de quienes lo vieron después de resucitado. Una escucha que nos entronca a todos con ese momento, todos  somos, por medio de esa atenta escucha, como Pedro y Juan aquienes se  anuncia que el sepulcro está vació y que Cristo ha resucitado. Así pues nuestra fe, desde la escucha cobra un sentido de obligatoria trasmisión y traspaso de una generación a otra. ¡Cristo ha resucitado, verdaderamente ha resucitado!, alegrémonos y gocémonos porque en ese sepulcro vació esta la muerte derrotada y la vida regalada para siempre en quien es el Señor de la existencia.

 Iglesia del Divino Salvador en Chora . Estambul

viernes, 19 de abril de 2019

Via Crucis en Munich 2017

Nos unimos a la Misión Católica española, que hoy participa en el Via Crucis que se organiza por el centro de la ciudad de Munich, recordando el que se celebró hace dos años.

domingo, 14 de abril de 2019

Diario Palentino. 14 de abril de 2019. Jesús entra triunfal en Palencia


Entre palmas, olivos y una gran multitud de gente ansiosa por verlo pasar. Así ha recorrido las calles La Borriquilla, una de las imágenes más queridas y esperadas de la Semana Santa capitalina, que un año más ha demostrado que su procesión es una de las más populares. La jornada comenzó con la bendición de palmas en la cofradía del Santo Sepulcro, responsable de la organización de la primera procesión del Domingo de Ramos, donde el obispo de la Diócesis, Manuel Herrero, hizo alusión al «agujero negro que hemos visto estos días en los medios de comunicación, que está a 55 millones de años luz de nosotros. Un agujero negro que todo lo atrapa, todo lo engulle». «Nosotros hoy miramos a Cristo, que no es un agujero negro, sino un abismo de riqueza, de sabiduría y conocimiento, un abismo de amor y misericordia. Nos atrae, nos cautiva, nos interpela y reta, nos llena de alegría», destacó.

viernes, 12 de abril de 2019

Capilla Mayor de la Basílica de San Isidoro


La Capilla Mayor data del siglo XVI, y su arquitectura se atribuye a Juan de Badajoz el Viejo. El padre Juan de Cusanza (alias Juan de León) encargó las obras en el año 1513, sustituyendo la antigua capilla románica de la infanta Urraca por la actual gótica. En 1971 se hizo una labor de limpieza y de restauración del suelo, que se hallaba muy deteriorado. Con ese motivo salieron otra vez a la vista los cimientos de la planta románica. La capilla está cubierta por bóveda de crucería con terceletes.

El retablo de factura aún gótica procede de la parroquia de Pozuelo de la Orden (Valladolid) y fue trasladado a San Isidoro en 1920, año en que esta localidad pertenecía al obispado de León. Fue labrado entre 1525 y 1530, contando con la participación en las labores de talla y ensamblado de un maestro llamado Giralte, quizá Giralte de Bruselas, y consta de veinticuatro tablas de pintura, atribuidas a un Maestro de Pozuelo, cabeza de serie de un amplio número de obras cuyo centro geográfico se sitúa en la ciudad zamorana de Toro.​ La documentación hallada posteriormente ha permitido precisar que los trabajos de pintura se repartieron entre Lorenzo de Ávila, seguidor de Juan de Borgoña y afincado en Toro.

La custodia es de plata, del artista M. García Crespo, y guarda la hostia consagrada expuesta día y noche por privilegio papal muy antiguo, que comparte con la catedral de Lugo. Bajo la custodia y en lugar preferente se halla la urna neoclásica que conserva los restos de San Isidoro, obra que el platero leonés Antonio Rebollo realizó en 1847.

jueves, 11 de abril de 2019

Iglesia del Crucifijo de Puente la Reina


Visitamos hoy la Capilla de un templo del Camino de Santiago, en la que se venera una de imagen de Cristo Crucificado, no sólo hermosa por su talla, sino conmovedora por su patetismo: el Crucifijo de Puente la Reina.


La iglesia fue edificada hacia el año 1146, a la entrada de la villa de Puente la Reina, en el Camino de Santiago. Se trata de una fundación templaria, y es clara la función militar del templo y monasterio, en la villa por la que se cruzaba el río Arga a través de un soberbio puente que terminó por dala nombre: Puente la Reina.


La iglesia era, originariamente de nave única, orientada y acabada en ábside de tambor. Pero en en siglo XIV se le adosó otra nave a su costado norte rematada en ábside policíclico, justo en el momento en el que la Orden del Temple había sido suprimida y asumida en los reinos hispanos por la Orden de San Juan de Jerusalén. En su cabecera de esta nueva Capilla se venera el Cristo gótico que da nombre al templo. Se trata de un Cristo del siglo XIV, patético en su concepción, que tiene la forma de Y,típico de esta época, de probable influencia centroeuropea.



miércoles, 10 de abril de 2019

El Santo Cristo de Burgos


Para todo el pueblo burgalés, el Cristo de Burgos, que se conserva en la capilla de su mismo nombre de la Catedral, constituye un referente incuestionable de devoción. En dicha capilla, todos los días, se rinde culto al Santísimo Sacramento y se realizan oficios religiosos; y hasta ella acuden numerosos vecinos y oriundos de Burgos para rogar ante la imagen del Santo Crucifijo protector de la ciudad.

La imagen cristífera no sólo llama poderosamente la atención por su notable antigüedad, sino por la originalidad de su composición plástica y su origen envuelto en la leyenda que se pierde en la noche de los tiempos.

Todos los burgaleses conocen su leyenda, que afirma que en la Edad Media, un acaudalado comerciante de origen burgalés, en uno de sus viajes por Alta Mar, encontró casualmente un arcón en el que se encontraba la divina imagen del Crucificado. Recogiéndola de las aguas, la llevó hasta su Burgos natal y allí la depositó en el convento de los Agustinos, afirmándose que las campanas “doblaron por sí solas a la entrada del Cristo en la Iglesia”. Desde entonces la fama milagrosa del Señor se extendió y el pueblo burgalés lo incardinó en el centro de su devoción. Con la exclaustración del convento agustino con las reformas de los gobiernos liberales, el Cristo pasó a la Catedral de Burgos, en donde se conserva y se venera hasta hoy.

La imagen reúne las característica de la escultura gótica, aunque en ella los rasgos cruentos de la pasión hacen evocar los tiempos del barroco -sin pertenecer en absoluto a este estilo posterior-, debido a que la talla está cubierta de piel de bóvido, lo que acentúa el realismo de la escultura. Los brazos, articulados, permitían en esta tipología de crucificado esceninificar tres escenas distintas de la Pasión durante los Oficios de Semana Santa (Crucifixión, Descendimiento de la Crux y Santo Entierro) con una misma imagen.

Fuente: http://catedraldeburgos.es/el-cristo-de-burgos/

martes, 9 de abril de 2019

El Cristo de la Vega. Toledo


El Cristo de la Vega es una leyenda popular toledana convertida en pieza literaria por José Zorrilla bajo el título A buen juez, mejor testigo. La leyenda hace referencia a una figura de la antigua basílica de Santa Leocadia.

Había en Toledo dos amantes: Diego Martínez e Inés de Vargas. Diego se va a la guerra, pero Inés pide a Diego que se case con ella cuando vuelva.1 Ante el Cristo de la Vega, Diego jura casarse con ella al cabo de un mes a su regreso de Flandes. Pasó el tiempo y Diego no regresaba mientras Inés lo esperaba impaciente. Tres años más tarde, Inés reconoció a Diego al frente de un grupo de caballeros que entraban a Toledo. Salió corriendo en su busca, pero Diego, que contaba con una nueva posición social y había olvidado sus promesas, giró el caballo y renegó de su juramento.

Desesperada pidió al gobernador de Toledo, don Pedro Ruiz de Alarcón, que intercediera. Al solicitar testigos, Inés se atrevió a presentar uno: el Cristo de la Vega.2 El tribunal en pleno y muchos curiosos acudieron a la iglesia del Cristo de la Vega y se arrodillaron ante el Cristo. Tras preguntarle si había sido testigo del juramento, se oyó un "sí, juro" y los testigos pudieron ver que el Cristo tenía los labios entreabiertos como si hubiera hablado y la mano desclavada y estirada como para posarla en los autos. Los dos amantes, inspirados, se retiraron a sendos conventos.

sábado, 6 de abril de 2019

Crucifijo. San Martín de Frómista


En aquel tiempo,
algunos de entre la gente, que habían oído los discursos de Jesús, decían:
«Este es de verdad el profeta».

Otros decían:
«Este es el Mesías».

Pero otros decían:
«¿Es que de Galilea va a venir el Mesías? ¿No dice la Escritura que el Mesías vendrá del linaje de David, y de Belén, el pueblo de David?».

Y así surgió entre la gente una discordia por su causa.
Algunos querían prenderlo, pero nadie le puso la mano encima.

Evangelio según san Juan 7, 40

martes, 2 de abril de 2019

El Paralítico de la Piscina de Betesda

El año 2003 se produjo en Canadá la película "El Evangelio según san Juan". El personaje de Cristo está representado por Henry Ian Cusick, quien expresa “una franqueza y la vitalidad que habla a una audiencia actual”. Según las primeras críticas, la interpretación de Saville es profunda y fiel al texto, dramatizando la profundidad y la urgencia de las palabras de San Juan, quien en su evangelio se lanza rápidamente a la vida adulta de Jesús. Asimismo, la producción ha logrado una realista representación de los templos, ciudades y laderas, con setenta y cinco actores principales y más de dos mil extras. Un grupo de expertos estuvo a cargo del diseño de los trajes y de los detalles arquitectónicos.

De esta película, vemos hoy una dramatización traducida al español de la escena de la Curación del Paralítico de Betesda.

lunes, 1 de abril de 2019

San Hugo de Grenoble y la Gran Cartuja

En Grenoble, en Burgundia, san Hugo, obispo, que se esforzó en la reforma de las costumbres del clero y del pueblo, y siendo amante de la soledad, durante su episcopado ofreció a san Bruno, maestro suyo en otro tiempo, y a sus compañeros, el lugar de la Cartuja, que presidió cual primer abad, rigiendo durante cuarenta años esta Iglesia con esmerado ejemplo de caridad (1132).

martes, 19 de marzo de 2019

Capilla de san José de Rabanal del Camino


La Capilla de San José de Rabanal del Camino fue fundada por don José Calvo, un adinerado arriero maragato, en el año 1733. Se trata de un templo barroco de una nave, con cubierta de bóveda de medio punto, que se remata con un ábside plano. El edificio fue dotado de un rico patrimonio escultórico, destacando el retablo central, presidido por la imagen de san José.


El santo está flanqueado por las imágenes de santa Bárbara y de santa Lucia. Por encima de él se halla un apóstol Santiago de notable factura, y el retablo se remata con la representación del Padre Eterno.


lunes, 18 de marzo de 2019

Capilla mayor de la Cartuja de Miraflores


Accedemos hoy a la Capilla Mayor de la Cartuja de Miraflores. La mandó construir la reina doña Isabel la Católica, para poder allí sepultar a sus padres, los reyes don Juan II de Castilla y doña Isabel de Portugal, junto con el hijo de estos, el infante don Alfonso de Castilla, En este santo lugar han orado los monjes cartujos desde entonces, y a él nos trasladamos en espíritu, para meditar las palabras del Señor, que hoy nos invitan a vivir en la misericordia y en la compasión.

domingo, 17 de marzo de 2019

Monte Tabor y sermón de san León Magno


El Señor puso de manifiesto su gloria ante los testigos que había elegido, e hizo resplandecer de tal manera aquel cuerpo suyo, semejante al de todos los hombres, que su rostro se volvió semejante a la claridad del sol y sus vestiduras aparecieron blancas como la nieve.

En aquella transfiguración se trataba, sobre todo, de alejar de los corazones de los discípulos el escándalo de la cruz, y evitar así que la humillación de la pasión voluntaria conturbara la fe de aquellos a quienes se había revelado la excelencia de la dignidad escondida.

Pero con no menor providencia se estaba fundamentando la esperanza de la Iglesia santa, ya que el cuerpo de Cristo, en su totalidad, podría comprender cuál habría de ser su transformación, y sus miembros podrían contar con la promesa de su participación en aquel honor que brillaba de antemano en la cabeza. A propósito de lo cual había dicho el mismo Señor, al hablar de la majestad de su venida: Entonces los justos brillarán como el sol en el reino de su Padre. Cosa que el mismo apóstol Pablo corroboró, diciendo: Sostengo que los sufrimientos de ahora no pesan lo que la gloria que un día se nos descubrirá; y de nuevo: Habéis muerto, y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también vosotros apareceréis, juntamente con él, en gloria.

Pero, en aquel milagro, hubo también otra lección para confirmación y completo conocimiento de los apóstoles. Pues aparecieron, en conversación con el Señor, Moisés y Elías, es decir, la ley y los profetas, para que se cumpliera con toda verdad, en presencia de aquellos cinco hombres, lo que está escrito: Toda palabra quede confirmada por boca de dos o tres testigos.

¿Y pudo haber una palabra más firmemente establecida que ésta, en cuyo anuncio resuena la trompeta de ambos Testamentos y concurren las antiguas enseñanzas con la doctrina evangélica?

Las páginas de los dos Testamentos se apoyaban entre sí, y el esplendor de la actual gloria ponía de manifiesto, a plena luz, a aquel que los anteriores signos habían prometido bajo el velo de sus misterios; porque, como dice san Juan, la ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo, en quien se cumplieron, a la vez, la promesa de las figuras proféticas y la razón de los preceptos legales, ya que, con su presencia, atestiguó la verdad de las profecías y, con su gracia, otorgó a los mandamientos la posibilidad de su cumplimiento.

Que la predicación del santo Evangelio sirva, por tanto, para la confirmación de la fe de .todos, y que nadie se avergüence de la cruz de Cristo, gracias a la cual el mundo ha sido redimido. Que nadie tema sufrir por la justicia, ni desconfíe del cumplimiento de las promesas, porque por el trabajo se va al descanso, y por la muerte se pasa a la vida; pues el Señor echó sobre sí toda la„debilidad de nuestra condición, y, si nos mantenemos en su amor, venceremos lo que él venció y recibiremos lo que prometió.

En efecto, ya se trate de cumplir los mandamientos o de tolerar las adversidades, nunca debe dejar de resonar en nuestros oídos la palabra pronunciada por el Padre: Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto; escuchadlo.

Sermón 51 (3-4.8: PL 54, 310-311.313

viernes, 15 de marzo de 2019

San Sisebuto y san Pedro de Cardeña


Nos recuerda hoy el Martirologio Romano la santidad del santo abad benedictino Sisebuto, No consta su patria ni el año de su nacimiento ni el de su ingreso en la vida monástica. Aparece en la histona como abad del monasterio de San Pedro de Cardeña en el que había profesado como monje, pero sin que se sepa tampoco la fecha exacta en que comenzó a ejercer la dignidad abacial, pero se suele dar la del año 1056. Entre ese año y 1086 aparece como tal abad en numerosos documentos del monasterio.

Participó en la fundación del monasterio de Santa María la Mayor de Valladolid, donde puso monjes bajo su misma regla de San Benito. Alcanzó gran esplendor bajo su mandato el monasterio, que se vio favorecido por los reyes, la nobleza y el pueblo.

Claustro de los Mártires

Se identifica a Sisebuto con el abad Sancho que acoge al Cid Campeador y toma la tutela de la mujer e hijas del gran guerrero durante su destierro. Fue amigo de otros santos abades de su tiempo: Santo Domingo de Silos, San Íñigo de Oña, y San García de Arlanza. Munó el año 1086. En 1835, cuando la exclaustración decretada por el gobierno de la regente María Cristina, las reliquias del santo fueron llevadas a la catedral de Burgos.


El monasterio de San Pedro de Cardeña se habrá fundado antes de 902 cuando el conde de Lantarón y de Cerezo, Gonzalo Téllez y su esposa Flámula realizaron la primera donación documentada al cenobio el 24 de septiembre de ese año de una serna en Pedernales y unas eras de sal.


En los siglos IX o X sus monjes fueron martirizados por los musulmanes, canonizados en 1603 y conocidos como los «Mártires de Cardeña». El monasterio goza de gran popularidad con gran afluencia de devotos, entre los que se encuentran el rey Felipe III de España y su esposa la reina Doña Margarita de Austria. Una de sus preciadas reliquias, la cabeza de su abad San Esteban, fue trasladada al Monasterio de Celanova; también se encuentran dos urnas en el Monasterio de la Huelgas y otra en la Catedral de Burgos.

Sepulcro del Cid y doña Jimena

Cada año, el 6 de agosto, aniversario del martirio, la tierra del claustro donde fueron sepultados los mártires, se teñía de un color rojizo que parecía sangre. El milagroso prodigio, ampliamente testificado, se repite hasta finales del siglo XIV. El año 1674 ya una vez levantado el nuevo claustro de estilo herreriano se reprodujo el hecho, personándose el arzobispo Enrique de Peralta, que vivamente impresionado encargó un estudio, interviniendo médicos y teólogos. Recogió el líquido, coaguló al ser puesto en agua hirviendo.

El Monasterio fue repoblado en 1942, después de la Exclaustración, por monjes trapenses de la Abadía de Nuestra Señora de los Mártires. El 1 de febrero de 1967 un violento incendio destruyó las tres cuartas partes del monasterio.