El Martirologio romano recuerda este día a uno de los santos más sorprendentes de toda la historia: Simeón el Estilita. Lo hace en los siguientes términos: Cerca de Antioquía, en Siria, san Simeón, monje, que durante muchos años vivió sobre una columna, por lo que recibió el sobrenombre de “Estilita”, y cuya vida y trato con todos fueron admirables (459).
Efectivamente, su afán ascético le llevó a querer vivir apartado del mundo, y se encaramó sobre una columna, primer de tres metros, luego de siete, y por fin, de hasta 17 metros. En griego, columna se dice "stylé",de ahí el nombre de estilita. Muchos acudían a él, y desde su columna él predicaba la conversión y la lucha contra los pecados.
En aquel lugar, se edificó en el siglo V uno de los monasterios más célebres de la Siria cristiana: el de san simeón, en Deir Semaan. Se ubica a 30 km al Noroeste de Alepo, ciudad de Siria (Entre Iraq y Turquía) en el continente Asiático. Se trata de un monasterio construido en torno al lugar donde vivió San Simeón Estilita, el cual forma en planta una cruz mediante cuatro basílicas, con centro en este lugar, que estaría coronado por una cúpula, en torno a la columna del santo. Las dimensiones del monasterio son enormes, y alcanzaría una altura libre en su interior de al menos 18 metros. Posteriormente se haría una muralla en su entorno, además de construcciones auxiliares para la vida del monasterio.
Su construcción se basa en el arco de medio punto y las cúpulas en forma de bóveda, aprovechando la distribución de cargas que estas formas ofrecen. Además se haría uso de columnas y contrafuertes para soportar la estructura principal. Gracias a esta forma de construir aligerada, fue posible levantarlo.
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